El ojo seco es una enfermedad es una enfermedad multifactorial de la superficie ocular en la que se produce una pérdida del equilibrio en los componentes de la lágrima. De este modo, la película lagrimal se vuelve inestable lo que determina la aparición de síntomas oculares, inflamación de la superficie ocular e incluso alteraciones neurosensoriales.
Es tremendamente frecuente. En España, la prevalencia del ojo seco es del 18,4%, esto significa que casi 1 de cada 5 personas a partir de cierta edad tiene síntomas de ojo seco. Aunque en la mayoría de los casos el ojo seco no produce complicaciones graves, es muy molesto para los pacientes que lo padecen. Precisamente por esa baja frecuencia de complicaciones graves, muchas veces no se presta la atención que se debe a estos pacientes. En Fernández Casas Oftalmólogos tenemos una unidad de ojo seco porque consideramos una de nuestras prioridades el tratamiento del ojo seco ya que disminuye mucho la calidad de vida de los pacientes que lo sufren.
Como se ha mencionado antes, no es una enfermedad que se produzca por un solo factor sino que suele haber varios factores actuando conjuntamente. Los más importantes son:
El ojo seco se puede clasificar en primario o secundario. El primario es el más frecuente y se debe a la conjunción de gran parte de los factores previamente descritos. El ojo seco secundario es el que aparece como consecuencia de otra enfermedad ocular como por ejemplo el Penfigoide Ocular Cicatricial, el Síndrome de Stevens Johnson o en la enfermedad de injerto contra huésped entre otros. El ojo seco secundario, aunque es poco frecuente, es mucho más grave que el primario y puede producir secuelas severas con pérdida de visión permanente las cuales son muy raras que ocurran en el ojo seco primario.
Uno de los objetivos más importante en nuestra clínica es el tratamiento avanzado del ojo seco, con el fin de mejorar la calidad de vida de los pacientes que lo sufren.
Con dicho fin hemos creado una unidad específica de ojo seco. Esta unidad cuenta con:
Aunque pueda sonar contradictorio, el lagrimeo es uno de los síntomas más frecuentes del ojo seco. Se produce porque en la mayoría de ojo secos no hay una falta de lágrima. Lo más frecuente es que la lágrima no tenga la suficiente calidad para lubricar, por ello, al ser una lágrima poco eficaz, el ojo intenta compensar produciendo más lágrima y como consecuencia ese exceso de lágrima hace que el ojo llore.
Además del lagrimeo u ojo lloroso, otro síntoma muy frecuente es la sensación de cuerpo extraño o sensación de tener arenilla o tierra en los ojos. Otros síntomas son el escozor, que el paciente refiera que se le ponen los ojos rojos, sensación de cansancio al final del día, etc. En casos severos en los que la córnea está afectada, los pacientes pueden notar dolor, visión borrosa y fotofobia.
No. Es fundamental para conseguir éxito hacer un estudio completo que permita caracterizar al máximo el ojo seco del paciente. Es conveniente ver si predomina una alteración en la producción de la lágrima o una alteración en la calidad de la lágrima y dirigir el tratamiento de manera adecuada.
Una vez caracterizado el ojo seco, se inicia un tratamiento que siempre debe ser en peldaños, es decir, empezando con las terapias más sencillas y subiendo escalones hacia tratamientos más complejos sólo si no se obtiene respuesta con los anteriores. Es importante que este tratamiento lo haga un oftalmólogo especialista en córnea y superficie ocular.
En la mayoría de los casos no se cura sino que se controla y se consigue que no afecte negativamente a la calidad de vida de los pacientes. En algunos pocos casos, cuando está originado claramente por un factor muy fuerte como puede ser algún fármaco, la eliminación de ese factor puede resolver por completo el ojo seco.
Por suerte sí. Se están desarrollando nuevos tratamientos continuamente. Actualmente una de las novedades que más éxito está consiguiendo es el tratamiento con un nuevo láser que se llama IPL. Este dispositivo emite una luz que aplicada a nivel de los párpados consigue un efecto antiinflamatorio y mejora de manera muy notable la calidad de la lágrima. Además los efectos permanecen generalmente durante semanas tras la sesión. En Fernández Casas Oftalmólogos disponemos del Lumenis IPL que es la plataforma IPL más completa del mercado.
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